Los procesos de expansión de las grandes economías, la división internacional del trabajo y la apuesta por la promoción de la inversión extranjera son factores que permiten la puesta en marcha de un proceso de inmersión china en la economía nacional, pues esta gran potencia, en su necesidad por encontrar nuevos mercados que abastezcan su gran demanda, busca escenarios abiertos y dispuestos a recibir sus inversiones de capital.

En este sentido, la información que presenta la base de datos de financiamiento chino en América Latina, elaborada por Diálogo Interamericano y la Universidad de Boston, manifiesta que desde el 2005 se han otorgado más de 125 millones de dólares en préstamos a América Latina y el Caribe. En el 2015 se llegó a representar una cifra mayor a

los préstamos otorgados por las instituciones financieras internacionales tradicionales, como el Banco Mundial (BM) o el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Dichos préstamos se han enfocado especialmente en aquellos países que tienen mayores dificultades para acceder al mercado de capitales tradicionales como lo son Venezuela, país con el mayor número de préstamos en la región, seguido por Argentina .

Ecuador. Al interior de estos países, los préstamos se han concentrado mayoritariamente en financiar proyectos en el sector energético y de infraestructura (Gallagher y Myers, 2014).

Ahora bien, pese a que estas cifras muestran una gran presencia de financiamiento chino en la Región, en Colombia la situación es diferente por cuanto aún no han sido otorgados préstamos directos por parte de entidades financieras chinas.

En materia comercial, China es el segundo socio de Colombia. No obstante, desde la perspectiva de las cifras de inversión extranjera, se muestra que el nivel de la inversión aún es bajo. En este sentido, las nuevas estadísticas sobre inversión extranjera directa en Colombia, reveladas este año por Procolombia (2016), indican una disminución en el flujo de inversión china, con lo cual este país pasó de estar en el 2014 en el puesto 34 de inversión extranjera directa en el país, al puesto 44 en el 2015. Esto mostró una reducción en las cifras totales de inversión (Procolombia, 2016).

Sin embargo, como se analizó en el boletín “Inversiones Chinas en Colombia: Revisión de los Acuerdos de Cooperación entre Colombia y China” (Gómez, 2015), el marco de cooperación existente entre los dos países da muestra del creciente interés de la potencia asiática en Colombia. Lo cual se evidencia en proyectos energéticos y de infraestructura, que se han desarrollado o se desarrollan actualmente, con participación de compañías chinas.

El objetivo de este documento es describir algunos de estos proyectos, haciendo énfasis en el carácter de la participación china en Colombia y las empresas involucradas en ello. El objetivo es proveer información acerca de hacia dónde se direccionan los intereses del capital chino en el país, qué sectores privilegian y qué empresas están participando de estos proyectos. Adicional mente se reseñarán algunos conflictos sociales y ambientales que han producido estos proyectos.